Axel - Angel Dorado -

**AXEL EN REVISTA LUZ**

Fue un típico pibe de barrio que comenzó tocando en el garage de su casa y hoy es un star en toda Latinoamérica y España. Cultor de la vida sana y enfocado hacia lo espiritual, revela qué aspectos le atraen de una mujer y confiesa que se podría enamorar tranquilamente de Susana Giménez.




Aunque está rodeado de un séquito de asesores, a Axel se lo ve un chico tranquilo y con los pies sobre la tierra. Podríamos decir que es un bicho raro de la escena musical nacional, no sólo por las características mencionadas, sino también por no tener preconceptos a la hora de confesar sus gustos musicales y de sentirse orgullosamente popular. “Soy un cantautor moderno de garage. Un romántico de barrio, reo y atorrante”, se autodefine, quien lanzó hace poco la reedición de su exitoso álbum Todo mi Universo (con cuatro tracks inéditos) y se prepara para presentarlo el próximo 21 de noviembre en el estadio Ferro.


-¿Por qué creés que tu música pegó tanto en toda Latinoamérica y España?
-Hay un trabajo de muchos años con disciplina, profesionalismo y conciencia. Siempre trato de sorprender a mi público. Además, siento que notan que en mi laburo hay transparencia, honestidad y buena onda. Madonna es la más grande porque siempre se renueva y tengo qué tratar de seguir su camino. Por eso escucho música de Europa y Oriente para inspirarme. Por todo esto impactan mis canciones.


-Como Celebra la vida...
-Sí. La gente está un poco necesitada de bálsamos. Estamos viviendo muchos cambios energéticos en el mundo, muchos cimbronazos y hay que aferrarse a algo, en este caso a la música. Y así pasó con este tema que irradia pila y optimismo.


-¿Cómo te manejás en el mundo de la música que es tan prejuicioso con el pop?
-Creo que la música es compartir. A mí me encanta Estela Raval, y no tengo drama en decirlo. Pienso que hay mucha inseguridad por parte de algunos que creen que por ser reales, decir lo que les parece o juntarse con otros artistas, sus fans se pueden ofender. La música es un idioma universal y no importa quién la cante.


-¿Qué cosas te inspiran al momento de componer?
-Principalmente historias personales. El otro día estaba con un amigo músico que me mostró algo que escribió y me di cuenta enseguida que no era una historia real porque no tiene pasión. No tiene veracidad y eso se siente.


-Lo espiritual es algo que te inspira bastante, ¿no?
-Es cierto. El espíritu es el combustible del alma. Sé que somos energía. Yo puedo controlarla. Nunca me enfermo porque sé frenar las enfermedades antes de que lleguen al cuerpo físico. Veo y charlo con ángeles todo el tiempo, también reconozco el aura de las personas. A veces cuando amaso pan recibo mensajes. Creo que cuanto más te abrís al Universo, éste más te habla.


-¿Qué características de chico de barrio aún mantenés?
-Todas, yo sigo yendo al supermercado a hacer las compras, juego al fútbol en el terreno baldío, saco a pasear a la perra, ando en bicicleta por mi barrio, cocino o hago picnics en la plaza Brown de Adrogué. Soy un pibe normal. Cuando estoy aburrido en mi casa me voy a tomar algo a un barcito que está ahí cerca. Todos me cargan porque piensan que voy porque hay mozas muy jovencitas... (risas)

-Hablando de mujeres, ¿qué te seduce de ellas?

-Lo primero que me impacta en una mujer es lo que me transmite su mirada y su sonrisa. Que sea fresca y real, que tenga espontaneidad y alegría. También que sea feliz, arriesgada y que crea que sus sueños son posibles.

-Le dedicaste una canción a Susana Giménez, ¿te podrías enamorar de una persona mucho mayor que vos?

-Por supuesto, para mí el amor no tiene tiempo ni edad, pasa por otro lado. Aparte Susana es una mujer bella por donde la mires.

-Últimamente se te ve más lookeado, ¿qué importancia le das a la apariencia?

-No me cuido mucho y la ropa no me interesa, sólo para los conciertos, si no, andaría siempre con lo mismo. Soy vegetariano por filosofía. Como muchas semillas, amaso mi propio pan saborizado, no consumo nada de carne y muy poco huevo. Hago mucho deporte porque me encanta, pero no soy para nada coqueto. En esto también soy un pibe de barrio.